IMPULSANDO EL PENSAMIENTO POSITIVO

Los optimistas ven el éxito como un derecho. Está ahí si están dispuestos a trabajar por él. Sin embargo, mucha gente cree que es una capacidad innata con la que nacemos. O se tiene, o no se tiene.

El optimismo es una mentalidad que cree en la posibilidad de un buen resultado. Igualmente, importante es entender que hay obstáculos en el camino. La vida está llena de imprevistos. Nadie consigue todo lo que quiere, y los optimistas no lo esperan. Sin embargo, construyen el tipo de resiliencia que los anima a seguir intentándolo. Los optimistas no se guían por el fracaso. Puede que haya muchos días de lluvia, pero al final siempre saldrá el sol. Si ese vaso de agua se derrama, siempre se puede volver a llenar. Así es como un optimista afronta la vida. Puede tropezar, pero siempre se levantará.

Este libro electrónico se centrará en que ser optimista mejora la calidad de vida y la salud en comparación con los pesimistas. Fomenta el pensamiento flexible, la creatividad y una mayor capacidad para resolver problemas. Todo ello disminuye el estrés y garantiza un cuerpo más sano. Veamos cómo se comportan los optimistas en comparación con los pesimistas, porque hay una diferencia significativa. Los optimistas saben que son responsables de su propia vida, con todos sus altibajos. No dependen de otros para sentirse bien, exitosos o atractivos. Son los dueños de su propio destino. Un optimista puede ser una persona discreta, que vive una vida sencilla y está muy contento con todo lo que tiene. Para él o ella, eso es el éxito. Los optimistas se asocian con otros optimistas. Las personas con las que te relacionas influyen en tu vida de muchas maneras. Se ha dicho que somos la suma de las cinco personas con las que más nos relacionamos. Los optimistas eligen bien a sus amigos. Los pesimistas, por desgracia, te arrastrarán con su pensamiento negativo.